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meditation assekrem

*** La historia de las religiones nos dice que la persona humana desde siempre “¡ha buscado a Dios!”.
A menudo oímos o nos sentimos tentados a decir:
-----> '¡NO CREO EN DIOS!'
El problema no es creer o no creer en Dios, sino creer que:
-----> '¡ES DIOS EL QUE CREE EN LA HUMANIDAD!'
 

Sí, aquí está la "Buena Noticia" para creer: ¡Dios está contando con nosotros!... Su amor es totalmente gratuito y no nos pide nada a cambio. De nosotros depende el abrir o no la puerta a Él… que Él cuente o no cuente en nuestra vida... que sea Alguien importante o no... Por otra parte es el Drama de la Humanidad desde sus orígenes como lo explica muy bien la Biblia en el libro del Génesis: “Pero el Señor Dios llamó al hombre: ‑¿Dónde estás? El contestó: ‑Te oí en el jardín, me entró miedo porque estaba desnudo, y me escondí” (Gn 3,9-10). De hecho, el problema radica en ver qué imagen tenemos de Dios (Padre o juez, Ternura o Castigo, Inmensa alegría o Miedo, etc.). El evangelio de Juan explica este drama con esta sentencia terrible: “Vino a su casa, pero los suyos no lo recibieron” (Jn 1,11). ¡Drama de los orígenes de la humanidad, el drama de hoy! La cuestión se impone: ¿Qué Dios esperamos nosotros esta Navidad?

 *** Los 'Místicos' y las personas en busca de Espiritualidad, muy rápidamente tuvieron la intuición de que la felicidad de la persona humana depende de la acogida que hacemos o dejamos de hacer a este 'Amor Gratuito que nos es ofrecido', y, así, se dejaron fascinar y se pusieron en camino… así, por extensión, este místico musulmán cuando nos explica su recorrido: "Busqué a Dios durante toda mi vida, luego me di cuenta de que me estaba esperando". O este otro místico cristiano que hace la misma constatación: “Dios, al ver que no vamos a su encuentro, es Él quien viene a nosotros... aún más, se entregó a nosotros... no por su razonamiento sino por el Amor” (Thomas Merton). Y de nuevo podemos preguntarnos: ¿Qué Dios esperamos nosotros esta Navidad?

*** Siempre me gusta decir el ejemplo de una Persona; una Anécdota; una Parábola o un Cuento para expresar mejor lo que quiero decir... bueno, hoy voy a hablar sobre una persona que me ha marcado a fuego y de la que me considero un discípulo, me refiero a Charles de Foucauld, de quien este 1º de diciembre acabamos de comenzar el 'Centenario de su muerte'. ¿Cuál es su historia? ¿Cuál es la imagen que él tenía de Dios?... Hombre de una juventud ligera, un buen día se deja encontrar por Dios. Leyendo la parábola del Buen Pastor que corre tras la oveja perdida (Lc 15, 3-7), exclama: “...de hecho es mi historia, oh Dios mío, eres tú quien me buscó, persiguió, conoció, quien me trajo de vuelta a casa... ¡Soy feliz! ¡Mi destino es embriagador! ¡Embriagado por su amor!". Y con todo su corazón deja que se eleve esta oración: "¡Haz que me convierta en loco por Tu Amor!". Y escribirá a uno de sus amigos: "Perdí mi corazón por este Jesús de Nazaret crucificado hace 1900 años y paso mi vida tratando de imitarlo tanto como me permite mi debilidad".

*** Por lo tanto, es obvio que el problema ya no es si "creo en Dios" o no, sino creer en la verdad: "¡Quien cree en mí" y, que me ama con amor incondicional, hasta el extremo de "perderse" por mí.

-------------------------> Esta Navidad: ¿Voy a dar la talla y ser capaz de acoger este amor increíblemente gratuito? ¿Este amor capaz de transformar los puntos cardinales de toda religión, y de todas mis convicciones y certezas? ¿Acoger la Ternura Infinita de Dios que se hizo Carne Humana, Divinamente Humana?

¡FELIZ NAVIDAD CON TODO MI CORAZÓN!

Hermano VENTURA (Hermanito de Jesús,... que debía formar parte del «relevo» en  Tibhirine en 1998) en l'Assekrem